
El manto tiene que ver con investiduras. Los sacerdotes y profetas tenían vestiduras específicas de lino fino ceñidos por una piel de cordero que cubría su pecho.
Cada sacerdote conocía lo que significa el manto profético, pues era la vestidura que Dios le otorgaba a sus servidores para resaltar en su labor dentro del tabernáculo según la Ley.
“Las vestiduras tejidas para el ministerio en el lugar santo, las vestiduras sagradas para el sacerdote Aarón, y las vestiduras de sus hijos para ministrar como sacerdotes.”
Éxodo 35:19 Versículos Conceptos
Cuando el Señor Jesús murió en la Cruz del calvario, se rasgó el manto del tabernáculo, otorgando a todos los hijos de Dios el derecho sacerdotal de estar en la presencia del Padre.
Referencia del manto profético
Cabe destacar que el manto profético en la actualidad, es una referencia metafórica del poder y de la unción de Dios que trae a través de los dones a nuestras vidas ministeriales y de servicio para Él.
Todos hemos sido llamados hijo de Dios, tenemos derecho a la unción poder de Dios; es su propósito a nuestras vidas y es su voluntad que seamos sacerdotes del mandato que ha dejado a nuestro cargo.
Es importante que nuestro manto o vestidura es espiritual; y refleja al mundo que somos hijos de Dios.
“y para que hagáis distinción entre lo santo y lo profano, entre lo inmundo y lo limpio” Levítico 10:10 Versículos Conceptos
¿Cómo hacer mis vestiduras blancas?
Nuestras vestiduras o mantos se mantienen limpios a través de la santidad; si estamos en pecado; es probable que nuestras vestiduras estén manchadas y corroídas pues lejos de Dios nada podemos hacer.
Cuando estamos en pecado, nuestras vestiduras espirituales no tienen valor alguno; metafóricamente estamos harapientos. Cuando somos redimidos por nuestro Señor, tenemos nuevas vestiduras para que el mundo reconozca que somos hijos de Él.
“Y éste habló, y dijo a los que estaban delante de él: Quitadle las ropas sucias. Y a él le dijo: Mira, he quitado de ti tu iniquidad y te vestiré de ropas de gala” Zacarías 3:4(VC)
A cuentas con Dios.
Dios corona de favor nuestras vidas, al preguntarnos qué significa el manto profético, se refiere a la unción de Dios.
En nuestro espíritu a veces apagamos la unción del poder de Dios con nuestras actitudes; nos alejamos de Él y el pecado que mora alrededor entra y causa estragos en nuestras vidas.
Reflexionemos.
Así como el hijo prodigo, que se fue de su casa; malgasto lo que su herencia y cuando no tenía nada; y vio que estaba hambriento, harapiento y derrotado volvió a su padre
Este padre amoroso, al verlo restableció sus derechos como hijo; no lo juzgo por sus errores, sino que lo limpió y vistió con nuevas ropas; le coloco joyas y celebro su llegada.
Dios nos Limpia y Restaura.
Así es Dios con nosotros; la unción que nos ha dado nadie la va a quitar; seguimos siendo sus hijos amados. A pesar de nuestros errores Dios siempre estará de nuestro lado.
El levanta nuestra cabeza y nos dice que es nuestro Padre y nos invita que nos pongamos a cuenta con Él.
“Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana” Isaías 1:18 (RVR)
Actitudes que agradan a Dios.
Ser humildes:
Debemos tener un corazón humilde delante de Dios; pues a través de la humildad nosotros podemos escuchar mejor su voz y realizar con éxito nuestro servicio.
“Con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor” Efesios 4:2(RVR)
Buscar de su presencia
A través de la búsqueda de Dios, podemos conectarnos mejor con sus propósitos.
Es bueno cultivar los hábitos de oración, ayuno y lectura de la palabra pues así estamos más cerca de Dios y facilita que él se revele a nuestras vidas.
“7 Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá” Mateo 7:7 (RVR)
Dar Frutos Espirituales.
Estando cerca de Dios, nuestro espíritu comenzará a dar frutos buenos en nuestro espíritu, los cuales serán de mucha ayuda en el servicio del Señor.
“Más el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.” Gálatas 5:22-23. (RVR)
Activando los dones:
Una persona que tiene el manto del Señor sobre su vida es una persona que maneja los dones que ha dado; eso es lo que significa el manto profético de Dios, pues viene de la sabiduría del Señor y se rebela a través de poder, fe y palabra.
“Así también vosotros, puesto que anheláis dones espirituales, procurad abundar en ellos para la edificación de la iglesia”1 Corintios 14:12
Mantos Proféticos: Colores y Significados
En la simbología bíblica, los colores de los mantos proféticos desempeñan un papel significativo, representando distintos aspectos espirituales y ministeriales. A continuación, exploraremos algunos de los colores más comunes y sus posibles significados:
Blanco:
El blanco simboliza la pureza, la santificación y la justicia. Representa la limpieza espiritual que se obtiene a través del perdón y la redención.
Azul:
Este color está asociado con la revelación divina, la verdad y la autoridad celestial. Los profetas que llevaban mantos azules eran vistos como portadores de mensajes directos de Dios.
Púrpura:
La púrpura denota realeza y dignidad. Los mantos de este color sugieren una autoridad divina conferida a aquellos llamados para liderar en el ámbito espiritual.
Rojo:
El rojo simboliza la pasión, el sacrificio y la sangre redentora. Un manto rojo podría representar un llamado profético marcado por la entrega total y la redención a través de la sangre de Jesucristo.
Verde:
Asociado con la vida, el crecimiento y la fecundidad espiritual. Un manto verde puede señalar un período de renovación y crecimiento en el ministerio profético.
Tipos de Mantos según la Biblia
La Biblia menciona diferentes tipos de mantos que desempeñaron un papel crucial en la historia y el ministerio de personajes bíblicos. Aquí hay algunos ejemplos:
Manto de Elías para Eliseo:
En 1 Reyes 19:19, Elías arroja su manto sobre Eliseo, marcando la transición del llamado profético de Elías a Eliseo. Este gesto representa la transferencia de autoridad y unción.
Manto de José:
En Génesis 37:3, Jacob regala a José un manto de muchos colores como símbolo de su favor especial. Sin embargo, este manto también se convierte en una fuente de conflicto con sus hermanos.
Manto de la Justicia:
En Isaías 61:10, se menciona el “manto de la justicia” que Dios coloca sobre sus siervos. Este manto representa la rectitud y la salvación provistas por Dios.
Manto de Redención:
En Zacarías 3:4, se describe cómo el sumo sacerdote Josué es vestido con ropas limpias después de ser purificado, simbolizando la redención y el perdón de Dios.