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Salmos para Momentos Difíciles.

En la vida todos pasamos por momentos difíciles. Lo importante es estar tomados de la mano de Dios en cada una de las dificultades que se nos presentan.

Por ello en esta oportunidad te traemos una selección de algunos versículos de  Salmos para Momentos Difíciles, que te ayudarán a afrontar estas circunstancias en tu vida, y salir bien librado con la bendición de Dios

Es nuestra oración sincera que Dios pueda tocar tu corazón a través de estas palabras que te dedicamos y de Su palabra santa.

 

“Que el SEÑOR te responda cuando estés angustiado;

Que el nombre del Dios de Jacob te proteja.

 Que te envíe ayuda desde el santuario;

Que desde Sión te dé su apoyo”.

Salmo 20.1-2 NVI

 

¿Qué debo hacer cuando pase por momentos difíciles?

 

 Si hay algo que aprendemos del libro de los Salmos es que Dios esta atento nuestro clamor cuando llevamos nuestro corazón y lo derramamos delante de Él, un claro ejemplo de este adecuado proceder lo encontramos en innumerables Salmos para Momentos Difíciles, en la hermosa e inspiradora Palabra de Dios.

 

Así que lo primero que debes hacer en momentos de dificultad es alabar a Dios, adorarlo y reconocer que de verdad necesitas de Él, porque solo en él podrás superar cualquier situación  y salir victorioso.

 

-Adora a Dios a pesar de la situación. 

-“Invoco al SEÑOR, que es digno de alabanza,

Y quedo a salvo de mis enemigos.

En mi angustia invoqué al SEÑOR;

Clamé a mi Dios,

Y él me escuchó desde su templo;

¡Mi clamor llegó a sus oídos!”

Salmo 18.3 y 6 NVI

 

 

 

-“Dios mío, clamo de día y no me respondes;

Clamo de noche y no hallo reposo.

-Pero tú eres santo, tú eres rey,

¡Tú eres la alabanza de Israel!

 En ti confiaron nuestros padres;

Confiaron, y tú los libraste”.

Salmo 22.1-4 NVI

 

 

 

-Derrama tu corazón delante de Dios. 

-“Cansado estoy de sollozar;

Toda la noche inundo de lágrimas mi cama,

¡Mi lecho empapo con mi llanto!

 Desfallecen mis ojos por causa del dolor”.

Salmo 6.6-7ª NVI

 

 

-“Como agua he sido derramado;

Dislocados están todos mis huesos.

Mi corazón se ha vuelto como cera,

Y se derrite en mis entrañas”.

Salmo 22.14 NVI

 

 

-“SEÑOR, oye mi justo ruego;

Escucha mi clamor;

Presta oído a mi oración,

Pues no sale de labios engañosos”.

Salmo 17.1 NVI

 

-Clama, ora, gime a Dios sabiendo que solo Él puede ayudarte. 

-“Clamo al SEÑOR a voz en cuello,

Y desde su monte santo él me responde”.

Salmo 3.4 NVI

 

-“Responde a mi clamor,

Dios mío y defensor mío.

Dame alivio cuando esté angustiado,

Apiádate de mí y escucha mi oración”.

Salmo 4.1 NVI

 

 

-“Atiende, SEÑOR, a mis palabras;

Toma en cuenta mis gemidos.

 Escucha mis súplicas, rey mío y Dios mío,

Porque a ti elevo mi plegaria”.

Salmo5.1-2 NVI

 

 

-“Tú, SEÑOR, escuchas la petición de los indefensos,

Les infundes aliento y atiendes a su clamor”.

Salmo 10.17 NVI

 

 

Salmos para momentos difíciles. 

Cuando estas enfermo. 

 -“Tenme compasión, SEÑOR, porque desfallezco;

Sáname, SEÑOR, que un frío de muerte recorre mis huesos.

Vuélvete, SEÑOR, y sálvame la vida;

Por tu gran amor, ¡ponme a salvo!”

Salmo 6.2 y 4 NVI

 

 

Cuando te atacan enemigos y adversarios. 

 -“Cuídame como a la niña de tus ojos;

Escóndeme, bajo la sombra de tus alas,

 De los malvados que me atacan,

De los enemigos que me han cercado”.

Salmo 17.8-9 NVI

 

 

-“¡El SEÑOR vive! ¡Alabada sea mi roca!

¡Exaltado sea Dios mi Salvador!

Él es el Dios que me vindica,

El que pone los pueblos a mis pies.

 Tú me libras del furor de mis enemigos,

Me exaltas por encima de mis adversarios,

Me salvas de los hombres violentos.

Por eso, SEÑOR, te alabo entre las naciones

Y canto salmos a tu nombre”.

Salmo 18 46-49 NVI

 

 

Cuando sientes que ya no puedes más. 

 -“Tú, SEÑOR, mantienes mi lámpara encendida;

Tú, Dios mío, iluminas mis tinieblas.

 Con tu apoyo me lanzaré contra un ejército;

Contigo, Dios mío, podré asaltar murallas”.

Salmo 18.28-29 NVI

 

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